31.12.08

Arcadio entrevista a Fernando Saldaña

Como algunos dicen que yo no existo, que soy un personaje inventado, quiero demostrar que es falso y entrevisto a Fernando Saldaña para que opine al respecto. ¡Ale!

Arcadio: ¿Cuándo nace Arcadio?
Saldaña: Arcadio ha existido siempre. Creo. Yo le conocí en 1998, en un mercado medieval en Totana, en Murcia. Él iba empujando un carro cargado de piedras curativas que vendía a los visitantes: "piedras para el dolor de cabeza, para el dolor de pies, para el mal aliento, para curar el estrés..." Y la gente se las compraba.
Para mí Arcadio nació hace algo más de diez años.

Arcadio: ¿Por qué escogiste a Arcadio como ayudante?
Saldaña: Porque es fiel y servidor. Algunos creen que es un poco tonto, pero no es verdad: encierra toda la sabiduría de nuestras gentes, toda la ingenuidad de un niño, y toda la imaginación de un artista. Arcadio no tiene maldad. Para él todo es juego y diversión.

Arcadio: Ahora que quiero ser mago ¿cómo voy a hacerlo si ya hay otro mago que se llama "Arkadio"?
Saldaña: Es que en 1998 no conocía a Arkadio. Pero eso no es un problema, porque hay muchos magos que se llaman Miguel, por ejemplo. Además, y sin pretender desmerecer a nadie, tú eres mucho más guapo que Arkadio. No hay más que ver tus fotos.

Arcadio: Para ser un buen mago ¿Tengo que vestirme con traje y corbata o pajarita?
Saldaña: Un mago es siempre mago. El hábito no hace al monje. Para ser mago hace falta hacer magia y que la gente vea que tú la haces.

Arcadio: ¿Entonces puedo seguir con mi bata, mi gorra y mis pantalones viejos?
Saldaña: Claro, pero deberías limpiarte los zapatos.
Arcadio: Es que nunca me acuerdo.
Saldaña: Al menos lávate las manos.
Arcadio: Es que nunca me acuerdo.

Arcadio: ¿Cómo se consigue hacer magia?
Saldaña: Tú lo has logrado porque aprendiste a decir las palabras mágicas. Otros usan los polvitos mágicos, o la varita. En realidad la magia se lleva dentro: si crees en ella, acaba saliendo, pero tienes que creer en ella de verdad.

Arcadio: Me gustaría hacer magia contigo, juntarnos en una gala: Arcadio y Saldaña juntitos los dos.
Saldaña: Somos magos, a lo mejor lo conseguimos un día.

Arcadio: Vale. Me marcho que no sé qué más preguntarte. Tenía muchas preguntas, pero se me han olvidado.
Adiós.

Firmado: Arcadio

Condiciones técnicas

En realidad para trabajar no necesito nada especial. Es que, como yo no tenía previsto actuar, no se me ha ocurrido pensar qué es lo que necesito.
Bueno, por pedir, que no quede.
Una toma de corriente con capacidad para 3.000 W.
Así engancho el equipo de sonido y unos focos si la iluminación no es buena en la sala.
Un camerino donde cambiarme, preparar todo, y dejar mis cosas.
No es por ser pejiguero, pero si tiene un espejo para ponerme guapo y agua corriente, mejor que mejor.
Una zona de escenario de 4X2 m. como mínimo.
¡Ah, y tengo que estar en la sala 45 minutos antes de que abran las puertas! Es para prepararlo todo y no tener que andar con prisas de última hora. ¡Ya sabes!
Y ya está. El resto lo pongo yo (bueno, me lo deja Fernando Saldaña, porque los equipos son suyos)
Firmado: Arcadio

30.12.08

¿Qué es "mago por casualidad"?

Pues no sé.
Unos dicen que es una obra de teatro, y puede que tengan razón. Otros, que un espectáculo de cuentos (porque cuento algunas historias). Y los más dicen que es un espectáculo de magia. También tienen razón, porque hay magia, mucha magia.
Yo os cuento, y decidís vosotros ¿vale?

Todo empieza cuando Fernando Saldaña es contratado para actuar como mago. Yo le llevo la agenda ¿sabes? y me lío con la hora. Total, que yo estoy preparándole la merienda y se llena todo de gente porque el cree que la gala es más tarde.
Para entretener al público hago como que yo soy mago, y consigo hacer magia de verdad. A partir de ese momento, como Saldaña tardará un par de horas en llegar, yo le cojo su chuleta y comienzo a hacer todos sus números: la inauguración de la sesión (que me sale fatal, pero no por mi culpa, sino por la de mis ayudantes), la aparición de los conejos (aunque no tengo sombrero), el juego de las pizarras, la aparición del pez (todavía no sé cómo es posible)... Y otras cosas mágicas que me pasan o se me ocurren por el camino.

Pues eso es.
¿Te aclaras?
¡No importa! Es un espectáculo divertido, muy divertido. Por lo menos una hora y medio minuto de comedia para todos los públicos, que ya es decir.
Firmado: Arcadio

Con mucho encanto

No estoy muy favorecido, pero me apetecía poner esta foto

Encantado, yo, que pude actuar en el Museo de la Casa Lis (¡qué lujo!), en Salamanca.
Fue el 13 de diciembre y ahí, en el patio, entre cuadros y criselefantinas (vaya palabreja, lo que me costó aprenderla), me convertí en mago una noche más.
No hubo mucha gente, pero los que estábamos disfrutamos de lo lindo, como lindo es el espacio.

Si no conocéis el museo, acudid a verlo algún día.No en vano es el Museo más visitado de Castilla y León.
¡Ah! y si está Fernando Saldaña por Salamanca, pedidle que os lo enseñe él, que me dicen que lo conoce bien y se sabe un montón de curiosidades. Yo un día hice una visita con él y me lo pasé de rechupete.
Firmado: Arcadio

El estreno

La foto no es del estreno, sino de Guijo de Ávila,
pero es que estoy tan guapete

¡Ya estoy aquí!
Lo que son las cosas quiquiricosas.
Tenía que haber estrenado el 11 de julio de 2008, en Cercedilla (Madrid) en el I Festival de Magia de la localidad. Y hasta allí me fui, pero llovió a raudales y hubo que aplazar la fecha porque era en la calle, así que el estreno oficial fue el 17 de agosto. Claro que, hasta entonces ya había viajado a varios pueblos de Zamora y Salamanca con mis cachibaches.
Después me fui más lejos, a Alcalá de Henares, en Madrid, donde habría 500 ó 600 peques del Colegio de los Escolapios.
También fui a Melilla, y viajé en barco y en avión ¡Qué emoción!
Firmado: Arcadio

Arcadio estrena casa

Esta es la cara que se me puso cuando vi las vistas desde el balcón de mi casa.

Me he independizado.
Así, como suena.
Me he marchado de casa de Fernando Saldaña, mi mejor amigo (él dice que es mi creador, pero no, es "mi amigo") y he alquilado un pisito a las afueras.
Yo soy Arcadio: hasta hace un par de días ayudante de Saldaña, en su faceta de "artista".
Ahora que he descubierto que yo también puedo ser mago (soy "mago por casualidad") abro mi propio blog en el que os iré contando un poco de todo cuanto me pase.
Me voy, que he puesto leche al fuego y se me sale.
¡Luego vuelvo!
Firmado: Arcadio